Te has hundido, yerto,
ajando siluetas
como con los ojos cerrados,
mudo de llanto
Y has sido sonrisa
tiznando vacío,
todos los cuerpos
desfilando en la boca
Sólo en tu andar
has de poblar caminos,
inventar tu sombra en mi estela,
revuelto
en las bocas que te claman
Todo el frío
resucitando el cuerpo,
en lo etéreo de tus manos
1 Hilvanes:
Fué una grata visita; me gusto bastante tu blog, y el poema.
saludos.
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