Confieso

Photo by unknown author

Tu cuello se curva perfectamente
para que mi lengua se inunde en el,
coleccione sus pliegues
y alberge su aliento

desde aquí pareces un pez,
resbalándose en el eco del océano,
o quizás un gato,
arqueando su musculatura
en espera del tacto …

a veces logro descubrir
los colores ocultos en tus ruidos,
o incluso,
el vaivén perpetuo de tu espalda,

es cuando espero en silencio
esparcir mi aliento en tus hombros,
despojar al aire de su facultad de habitarnos.

Te supongo

Photo by unknown author

Ya no sé como dejarte,
te envuelves en sombras,
te haces quiebre en las palabras
y habitar mis canciones
te parece inevitable …

yo , pretendo retener tus manos,
abrigarme de tus sílabas,
del acento que dejan tus noches
encima de la I de esta fatiga,
mientras con los dedos
repaso los bordes de tu abismo…

te pareces tanto al vértigo en los columpios,
a la habitación escondida
que traen consigo los libros,
donde uno se encoje hasta adentro,
pero hasta adentro de uno mismo…

esta tarde, desabotoné tus lunares
en la lengua,
le prendí fuego a tus iglesias
e incluso, corrí por todas tus plazas,

y heme aquí, desvelada,
de viaje por la vida
sin poder, aún, cargar las maletas…

Espejeando

Painting by Edward Hopper

Aún te encuentro en mis canciones,
pareces caerte del borde en las palabras,
e incluso, tallar su cuerpo bajo la lengua…

nunca dejaste de invadirme,
incluso en las sombras vuelves,
te arrastras y me arrastras,
empapando al día
de una especie de humedad
que se ahoga entre las piernas;

y te supongo entre las sábanas,
resumiendo el día en antiguos nombres
que desmiembro,
a pesar de alguna vez pertenecerme …

te escondes, amor,
bajo los cimientos de este olvido,
aunque de lejos oiga crepitar tu vuelo,
aunque mi boca retenga la holgura de tu espalda

Brecha

-photo by Unknown author-

Dueto

Ofelia / Gia

Es equilátera tu forma de quiebre,
como te deshilas al hielo,
y en medio
alrededor,
por debajo de la forma de nube
imprescindible,
…hay un deshuesadero a la orilla
del sol,
te nublas
te habita un vértigo en medio
de estas olas

descalza miras el cielo,
el hueco entre los ojos
silbando algún añejo eco,
y es así como te desprendes,
te olvidas, te abandonas
flotando desde algún incierto lugar
que saboreo y amarro bajo los dientes,
para sostenerte en los comienzos,
en los fines, hasta en los oscuros silencios
que me traen las partidas

muy comunes a esta a hora, y
a cualquier hora si es el tiempo
de la muerte,
es una noche efímera en la ropa
y en la piel,
perderse es un camino transitado,
muy a pesar de rotar tu cabeza
hasta donde alcanza el horizonte,
te dejas caer al par
del abandono

quisiera a veces recalcar el dolor
que me deja tu palidez,
sólo para reencontrarte más
bajo mis escamas,
entre los dedos del reloj,
incluso en la savia
que parece desprender el ayer …

yo deseo tus manos desde el vacío,
lamer los trazos de tu vida
mientras desenredo tu mirada
allá lejana, allá deshabitada,
allá dormida …

allá como que nunca te hubiese
tenido,
pues si la hora cruje al recuerdo,
todo se hace bruma y naufragio
dentro de una habitación pequeña,
dentro de tu vientre pequeño,
y que esta columna de tildes
levanta sus hélices
y haga metamorfosis en tus nudos

en tus pasadizos,
en los suburbios que dejaste
aquí, a la deriva,
astillando porqués,
silenciando todo en esta casa,
porque hoy ya me faltas,
no tan sólo en la carne y el espíritu.

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Gracias, gracias por revivirme un poquito,
por desangrarte conmio y por seguir tan en las raíces,
tan en el espejo, tan en mi.
Te adoro Jazz.