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No es el frío, ni la noche;
ni la calle y su voz
agujereada de aullidos,
tampoco lo sigiloso
que se vuelve el reloj por estos días,
o como de pronto,
huimos de ti y de mí en los espejos
aquí y allá,
es un verbo en las orillas,
todo el océano,
de aquí hasta tus pasos
es el un vaivén del silencio:
el vértigo,
el abismo que es tu nombre
No es el frío, ni la noche;
ni la calle y su voz
agujereada de aullidos,
tampoco lo sigiloso
que se vuelve el reloj por estos días,
o como de pronto,
huimos de ti y de mí en los espejos
aquí y allá,
es un verbo en las orillas,
todo el océano,
de aquí hasta tus pasos
es el un vaivén del silencio:
el vértigo,
el abismo que es tu nombre
3 Hilvanes:
Tiene un aura triste y media trágica. Como que el poema está más que vacío, está lleno como de una bruma, una niebla que lo envuelve.
Beijos.
Santiago.
:/
AVECES tomar un poco de sol y un vaso de agua sirve!
saludos, espero verte por la U
^^
paso y te dejo un beso.. y otro.. y otro...
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